Comprendiendo el Potencial del Impacto Económico en el Hundimiento de Embarcaciones  para la Recreación Subacuática

Comprendiendo el Potencial del Impacto Económico en el Hundimiento de Embarcaciones  para la Recreación Subacuática

Isla Larga, Puerto Cabello
Pecio en Isla Larga frente a Puerto Cabello, Estado Carabobo. Foto: Humberto Ramírez Nahim

Mas y mas comunidades costeras y aun organizaciones sin fines de lucro  (e.g. the San Diego Oceans Foundation and Artificial Reef Society of British Columbia) están promoviendo y financiando proyectos de “ embarcaciones como arrecifes” con el objetivo de promover nuevos destinos para el turismo de buceo  recreacional.

 Barcos, aviones y otras estructuras están encontrando su camino al fondo del mar a lo largo de las costas de Norte America, Europa, Australia y otros lugares. Mientras muchos puristas ven el hundimiento de embarcaciones y aviones en aguas costeras como algo similar a desechar, mas y mas comunidades costeras ven estas estructuras como medios de protección a la línea costera, creando nuevos hábitats para los peces y la vida marina y proveyendo nuevos destinos para el turismo de pescadores y submarinistas (Baine, 2001). En muchos casos (e.g. the sinking of the Yukon off the San Diego coast) el objetivo de “embarcaciones para arrecifes” es exclusivamente crear nuevos destinos  económicos para el buceo scuba; en algunos casos las embarcaciones para arrecifes son incluso designadas como zonas libres de pesca. A pesar del éxito de organizaciones regionales recogiendo fondos para financiar embarcaciones para arrecifes, nunca es seguro que una embarcación como arrecife en un punto especifico represente una buena inversión económica – especialmente cuando su destino este limitado al buceo SCUBA.

 La escala y avance del hundimiento de embarcaciones para crear arrecifes artificiales, especialmente aquellos diseñados para la recreación submarina, esta aumentando rápidamente. En el Estado de Florida, sobre 380 naves han sido hundidas en sus cayos para crear arrecifes artificiales. En el 2004 el USS Spiegel, una embarcación naval de 510 pies, fue hundida en los cayos del Santuario Nacional de Florida. Hasta la fecha, sobre las 700 embarcaciones sirven como arrecifes artificiales en la plataforma costera de los US. La mayoría de estas embarcaciones  se encuentran en la costa de Florida (380), New Jersey (129), Carolina del Sur (100), y New York (65) (http://njscuba.net/reefs/ index.html accessed 9.18.2004).

Otros estados quedan muy atrás en la creación de arrecifes artificiales. Por ejemplo , mientras los esfuerzos se han realizado para incrementar el uso de arrecifes artificiales en California, el estado posee solo 10 arrecifes artificiales destinados al buceo recreacional.

 Mientras la atención destinada al desarrollo de arrecifes artificiales a aumentado dramáticamente en la década pasada, los mismos no son un desarrollo reciente. Dos mil años atrás, el geógrafo Griego Strabo estableció que los Reinos Persas construyeron arrecifes artificiales a los largo del río Tigris (Hess et al., 2001). En los Estados Unidos, los arrecifes artificiales datan de unos 150 años; de cuando cabañas de troncos eran hundidas al sur de California para mejorar la pesca (Hess et al., 2001). Lo que diferencia la creación de arrecifes artificiales modernos de los arrecifes del pasado es la escala  y costo y el potencial beneficio económico que pueden generar mediante el mercadeo de una ubicación estratégica.

 Crear una embarcación para arrecife pude ser costoso. El costo de preparar una embarcación para arrecife puede variar entre $ 46.000 a $ 2 millones, dependiendo del tamaño de la nave (Hess et al., 2001). Este costo representa  erogaciones directas por ciudades, condados,  estados o organizaciones sin fines de lucro y son inversiones que están supuestas a producir un retorno económico. Para los gobiernos especialmente locales, las embarcaciones como arrecifes están destinadas a crear Fuentes turísticas de ingresos, incrementando las ganancias locales y propiciando nuevos ingresos  en impuestos. Para los grupos sin fines de lucro el retorno de estas inversiones no necesariamente son tan obvias. Actuando entre el publico submarinista, estos grupos buscan crear nuevas fuentes recreacionales que incrementen la cantidad y calidad  de las oportunidades de buceo de sus miembros. Los beneficios que estos usuarios derivan puede no ser aparente en el mercado e incluye el valor de las experiencias de inmersiones en navíos dispuestos mas allá de lo que los buzos gastan en el mismo. Estos últimos valores, conocidos como valores ajenos al mercado, pueden ser significantes, pero a menudo difíciles de medir.

Isla Larga, Puerto Cabello
Pecio en Isla Larga frente a Puerto Cabello, Estado Carabobo. Foto: Humberto Ramírez Nahim

Para entender mejor el beneficio potencial económico de los arrecifes artificiales en su generalidad, un numero de estudios se han realizado para estimar sus valores de Mercado y ajenos al Mercado. A finales de 1970, estos estudios comenzaron a cuantificar el beneficio económico de la pesca recreacional y el buceo en arrecifes artificiales (Daniel, 1976). A través del tiempo, la precisión y entendimiento de estos estudios han aumentado para proveer un retrato mas completo del beneficio económico potencial de los arrecifes artificiales.

 Las embarcaciones como arrecifes pueden adoptar un numero diverso de usos y valores incluyendo protección de la línea costera o mejoramiento y concentración de pesquerías. Sin embargo los proyectos de embarcaciones como arrecifes mayormente son asumidos con el propósito primario de propiciar el buceo recreacional y no predatorio. El buceo recreacional es una industria de crecimiento rápido y la preparación de arrecifes artificiales se incrementa y mantiene para su uso expreso en el buceo recreacional. Leeworthy et al. (2005) estima que 2.86 millones de personas por encima de los 16 años han participado en actividades de buceo en el año 2000. De 90 actividades para las cuales la participación fue estimada, la inmersión SCUBA resulto ser la actividad de mayor crecimiento en Estados Unidos.

Referencia:

Linwood H. Pendleton, Program in Environmental Science and Engineering, Department of Environmental Health Sciences, University of California, Los Angeles.

Nota: Un punto de vista sobre las experiencias en Estados Unidos en torno a la administración de arrecifes artificiales.